Durante tres días, del 28 al 30 de marzo, un total de 28 jóvenes líderes de las barras deportivas Ultrafiel y Revolucionarios se reunieron en las cercanías de Tegucigalpa para reflexionar en torno a los temas de conflicto, violencia y paz y, a partir de actividades analíticas y lúdicas, formular propuestas de acción que puedan conducir a la transformación de su propia dinámica y la de su entorno inmediato.
Con el apoyo financiero de la Fundación Berghoff y en el marco del proyecto Protagonismo Juvenil en Honduras: Barras Deportivas por la Paz, ejecutado por el Programa Juventud de Interpeace para Centroamérica, el taller Conflicto, violencia y paz, tuvo como objetivo iniciar un proceso de capacitación para líderes y lideresas de dos de las principales barras deportivas de Honduras. Se busca, mediante este proceso, contribuir al desarrollo de competencias, habilidades y herramientas de análisis y transformación de conflictos en las y los jóvenes.
Este primer taller contó con la participación de igual número de jóvenes de ambas barras, entre ellos, los máximos líderes de estas dos agrupaciones juveniles, quienes consideraron que la actividad bien podía catalogarse como “histórica”, pues los jóvenes, que tradicionalmente se han visto como adversarios, lograron una convivencia armónica y hasta amistosa durante las jornadas, y participaron juntos en grupos de análisis y generación de propuestas para contribuir al cambio en el país.
En un ambiente de confianza, participativo y dinámico, se reflexionó sobre la naturaleza de los conflictos y cómo estos, manejados positiva y creativamente, pueden ser fuentes de innovación y cambio. La puesta en práctica de este principio fue visible desde el inicio del taller, cuando los jóvenes participantes manifestaron su deseo de que la actividad también significara una oportunidad de acercamiento y encuentro para reducir las enemistades entre ambas barras, prevenir la violencia y construir la paz. “Los que estamos acá ya somos un enemigo menos en la calle”, manifestó uno de los participantes.
Barras deportivas por la paz
Con una tasa de homicidios de 85.5 por cada cien mil habitantes, Honduras es el país más violento del mundo. Esta tasa se duplica cuando las víctimas son adolescentes y jóvenes: 150 homicidios por cada cien mil habitantes menores de diecisiete años, y 190 homicidios por cada cien mil habitantes mayores de dieciocho. En la respuesta del Estado a esa violencia continúa primando el enfoque represivo pese a que, históricamente, se ha comprobado que este solo ha contribuido a agravar el problema. En ese contexto, explica Isabel Aguilar Umaña, Coordinadora del Programa Juventud de Interpeace para Centroamérica, «suele ser común que […] las barras deportivas (grupos de jóvenes que fundamentalmente se unen por su acendrada simpatía para con determinado club o equipo deportivo) sean consideradas como una forma de agregación juvenil eminentemente negativa. Sus miembros tienden a ser equiparados con pandilleros y se les considera, apriorísticamente, delincuentes juveniles a quienes, por lo tanto, cabe temer […] o perseguir».
El proyecto Protagonismo Juvenil en Honduras: Barras Deportivas por la Paz de Interpeace tiene como objetivo contribuir a que jóvenes integrantes de las principales barras deportivas hondureñas se conviertan en agentes de cambio a favor de la no violencia y la paz en el país. Además, el proyecto persigue el fortalecimiento de las capacidades de líderes clave de las barras Ultra Fiel y Revolucionarios, para que resuelvan conflictos de manera no violenta, creativa y transformadora, de manera que las barras sean reconocidas como actores importantes para la consecución de la paz social. Al mismo tiempo, se busca propiciar el involucramiento de los miembros de las barras deportivas Ultra Fiel y Revolucionarios en el impulso de acciones de prevención de violencia.
“Este es un esfuerzo de ambas barras para prevenir la violencia. Sabemos el conflicto que se nos vino a nosotros. La coincidencia es que tenemos los mismos problemas como jóvenes que somos.”